Claves de gestión para que tu centro sea exitoso: ¿Cómo me va?

En este artículo vamos a desgranar, con ayuda de preguntas, lo que se necesita mantener bajo control para lograr el éxito empresarial con nuestro centro veterinario.
En principio, aunque parece una pregunta muy simple, la realidad es que la mayor parte de los centros veterinarios desconocen la respuesta a ¿Cómo les va?. En el día a día de la actividad empresarial, la mayor parte de los centros son solventes, pero, ¿tienen potencial de crecimiento?, ¿pueden mejorar la eficiencia de sus procesos, y por ello mejorar la productividad? O, por el contrario, ¿está comprometida su supervivencia a medio/largo plazo?
El análisis de una auditoría detallada ya informa en gran parte sobre la evolución de la empresa. El cuadro de mandos integral, tal como se vio en el artículo anterior, nos informará a través de los indicadores generados si la actividad empresarial es todo lo sana que debiera ser, y no solo se trata del beneficio empresarial, si no también de su calidad. Por ejemplo, si los ingresos de un centro veterinario dependen en gran medida de las visitas por vacunaciones, no es complicado deducir que se encuentra en una situación bastante débil, pues un cambio en las recomendaciones de los planes de vacunación, o una competencia cercana por precios bajos pueden hacer que esta situación cambie en pocos meses.
También existen otros indicadores que no se pueden cuantificar económicamente, como son aquellos que hacen referencia a la rotación del personal colaborador en un centro veterinario, o el flujo neto de clientes, pero que si tienen una incidencia clara en la marcha del negocio. Esto nos lleva a la siguiente clave, que responde a la pregunta de "¿Cómo lo hago y de la que hablaremos en un próximo artículo